Puntos clave de la noticia:
- Runes enfrenta desafíos desde su debut hace tres semanas, a pesar de generar entusiasmo al introducir memecoins en Bitcoin.
- La actividad de red y los ingresos de los mineros han disminuido drásticamente, planteando preocupaciones sobre su viabilidad a largo plazo.
- La salida de mineros de Bitcoin debido a la disminución de la rentabilidad podría estar contribuyendo al declive de Runes, aunque algunos analistas creen que es pronto para considerarlo un fracaso total.
Runes se ha estado enfrentando a algunos desafíos desde su debut hace apenas tres semanas. A pesar de la promesa de hacer una revolución al introducir memecoins en Bitcoin y tras un entusiasmo inicial entre los inversores y mineros, los últimos datos muestran un panorama poco optimista.
Desde su lanzamiento, Runes ha atravesado una caída progresiva en su actividad de red y en los ingresos generados para los mineros. Durante su primera semana, alcanzó un récord de actividad en la red de Bitcoin, atrayendo la atención de muchos que esperaban que ayudara a compensar la disminución en las recompensas por bloque después del halving. Sin embargo, la euforia inicial ha sido seguida por un declive pronunciado.
Según datos recientes, la cantidad total de Runes generados ha disminuido drásticamente en las últimas semanas, alcanzando mínimos históricos durante el último fin de semana. Además, las tarifas ganadas por los mineros se han desplomado. Comienzan a surgir preocupaciones sobre la viabilidad a largo plazo.
Runes Debe Encontrar su Lugar en el Mercado
Aunque todavía genera tarifas considerables en la red de Bitcoin, su actividad sigue caminos complicados, y algunos comienzan a cuestionar su futuro. Sin embargo, expertos sugieren que la disminución en la actividad podría ser parte de una corrección natural a medida que encuentra su lugar en el mercado.
La salida de mineros de BTC debido a la disminución de la rentabilidad podría estar contribuyendo al declive de Runes. Con la caída de los ingresos diarios, muchos mineros están reconsiderando sus operaciones y buscando alternativas más rentables.
Más allá de la complicada situación, algunos analistas creen que es demasiado pronto para considerar a Runes como un fracaso total. Aún está en sus etapas iniciales y podría encontrar una manera de recuperarse y establecerse en el mercado a largo plazo. Deberá superar las dificultades actuales para retener a los mineros y cumplir con las expectativas iniciales de mantener la rentabilidad en un mercado volátil y competitivo.
