La SEC está sometiendo a un escrutinio cada vez mayor debido al trabajo de los auditores en los exchanges de criptomonedas. Los reguladores han expresado su preocupación por el hecho de que las empresas de criptomonedas exageren los estrechos informes proporcionados por las empresas de auditoría.
Resistencia Contra los Avances
Como resultado de la creciente preocupación de que los inversores puedan estar obteniendo una falsa sensación de tranquilidad de los informes que las empresas de auditoría preparan para las empresas de criptomonedas, la Comisión de Bolsa y Valores está aumentando el escrutinio de las empresas responsables de preparar dichos informes.
Una empresa de auditoría ha dejado de trabajar con clientes de criptomonedas debido a esto. Además, no es ningún secreto que las empresas de criptomonedas están ansiosas por obtener la aprobación de un auditor para que sus clientes, inquietos, puedan estar tranquilos.
Como uno de los mayores exchanges de criptomonedas del mundo, Binance ha presentado este mes un documento que describieron como «prueba auditada de reservas». Un portavoz de Binance dijo que el documento fue examinado de forma independiente por la empresa auditora Mazars. A pesar de la falta de información financiera en el informe, Mazars no expresó una opinión.
En el informe se alega que algunas pruebas de reservas no revelan ni siquiera el número aproximado de reservas que deben mantenerse. Según un informe emitido por Mazars en Sudáfrica este mes, el número de activos y pasivos que figuran en este informe no se revela por razones de confidencialidad.
El mismo socio de Mazars en Sudáfrica firma tanto el informe de Crypto.com como el de Binance.
La SEC afirma que, dado que las empresas de criptomonedas suelen carecer de controles internos eficaces, que fue uno de los factores que llevaron a la quiebra de FTX, existe un mayor riesgo de que se cometan errores en sus estados financieros. En opinión de los conocedores de la industria, esa es una de las razones por las que las mayores empresas de auditoría, que tienen los medios para ser muy selectivas con sus clientes, se han mantenido en gran medida alejadas de estas disputas.
En lo que respecta a la industria cripto, debemos reconocer que la SEC y el informe del WSJ demuestran que los reguladores, así como las instituciones financieras tradicionales, siguen haciendo todo lo posible por limitarla. Es cierto que los exchanges fueron los primeros en revelar información sobre sus reservas, pero ahora los reguladores están intentando advertir a los usuarios sobre esta práctica.
Ha habido varios intentos por parte de los reguladores para frenar el crecimiento de la industria, pero no han tenido éxito. En consecuencia, los exchanges no han sufrido mucho las consecuencias, como tampoco lo han hecho otras empresas. No cabe duda de que la naturaleza descentralizada de esta industria hará que los usuarios estén protegidos de la mejor manera posible.