Puntos clave de la noticia:
- El borrador Digital Asset PARITY Act, impulsado por Max Miller y Steven Horsford, busca simplificar impuestos cripto y alinearlos con reglas tradicionales.
- Incluye una exención de minimis para stablecoins reguladas vinculadas al dólar en transacciones pequeñas, evitando reportes de ganancias de capital en compras rutinarias.
- Aclara reglas para inversores extranjeros, aplica wash sale y constructive sale, permite mark-to-market y préstamos no imponibles, y también difiere impuestos de minería y staking.
La política fiscal cripto en Estados Unidos se mueve hacia un enfoque más operativo, con un borrador legislativo que busca reducir fricción sin perder trazabilidad. La Digital Asset PARITY Act, respaldado por los representantes Max Miller y Steven Horsford, pretende simplificar la tributación de activos digitales y alinearla con reglas de acciones, commodities y valores. El diagnóstico es directo: el sistema vigente no fue diseñado para activos basados en blockchain y ha generado incertidumbre para traders, inversores y usuarios. La agenda es convertir complejidad en consistencia regulatoria. Evita restricciones amplias y apunta a fallas puntuales.
Mecánica fiscal
El texto propone actualizar el código fiscal para que participantes y empresas tengan expectativas claras y menos zonas grises. Un bloque clave se centra en stablecoins de pago: crea una exención de minimis para stablecoins reguladas, vinculadas al dólar, usadas en transacciones pequeñas. La lógica es pragmática: permitir compras rutinarias sin activar cada vez el cálculo y reporte de ganancias de capital. El objetivo es habilitar pagos cotidianos con menor costo de cumplimiento. Busca reducir fricción y hacer más uniforme la fiscalización y el reporte, especialmente para usuarios y comercios que operan con activos digitales.
La propuesta también busca ordenar la actividad transfronteriza al aclarar reglas de ingresos para inversores extranjeros que usan plataformas cripto con base en Estados Unidos, aportando certidumbre sin debilitar estándares. Para traders profesionales, añade disciplina y consistencia: aplica reglas de wash sale y constructive sale a activos digitales negociados activamente, cerrando estrategias agresivas basadas en el timing. A la vez, permite contabilidad mark-to-market para elegibles y ofrece tratamiento no imponible a préstamos de activos digitales que funcionen como préstamos reales. La paridad llega con guardrails de mercado. El marco busca comparabilidad con mercados tradicionales.
En minería y staking, el borrador aborda el problema del “ingreso fantasma”. Permitiría que los contribuyentes elijan diferir impuestos sobre recompensas hasta un evento claramente definido; cuando corresponda, se gravarían como ingreso ordinario y con una base de costo establecida para ganancias futuras. Un analista, Mason Blak C, lo interpretó como señal de que los legisladores atienden retos reales, reducen fricción para usuarios, aclaran reglas para desarrolladores y limitan oportunidades de abuso fiscal. Aunque es un borrador, marca un paso hacia reglas más prácticas. La meta declarada es claridad, equidad y sentido común tributario.
