Puntos clave de la noticia:
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El World Gold Council planea digitalizar el mercado de oro de Londres con “pooled gold interests” (PGIs), unidades que representan fracciones de lingotes.
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La primera prueba se realizará en Londres en el primer trimestre de 2026 con bancos y casas de trading, buscando ampliar el acceso y la liquidez del mercado.
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El oro superó los $3,550 por onza esta semana, duplicando su valor en dos años.
El World Gold Council prepara un plan para digitalizar el mercado de oro físico de Londres, valorado en unos $900,000 millones.
La iniciativa consiste en crear una nueva unidad digital llamada “pooled gold interests” o PGIs, que permitirá a los inversores adquirir una fracción de propiedad sobre lingotes. La primera prueba está programada para el primer trimestre de 2026 y contará con la participación de bancos y firmas de trading con sede en la capital británica.
El proyecto busca modernizar el comercio del oro y ampliar su alcance hacia perfiles de inversión que hoy no acceden fácilmente al mercado físico. Según explicó David Tait, director ejecutivo del consejo, la digitalización es una condición necesaria para integrar al oro en el ecosistema financiero contemporáneo. El objetivo es establecer un estándar que permita utilizar los mismos instrumentos financieros que ya se aplican en otros activos, pero directamente sobre unidades digitales respaldadas por el metal precioso.
La creación de PGIs apunta a aumentar la liquidez y a reducir las barreras de entrada, ofreciendo una alternativa más ágil frente a la compra tradicional de lingotes o monedas. Al representar propiedad fraccionada, los nuevos instrumentos permitirían que un mayor número de inversores participe en el mercado sin necesidad de asumir los costos logísticos del almacenamiento y transporte del metal.
El Oro Duplicó su Valor en Dos Años
El oro alcanzó esta semana un récord histórico superior a $3,550 por onza, duplicando su valor en apenas dos años. La escalada responde a la creciente demanda de activos considerados refugio en medio de tensiones geopolíticas y volatilidad en otros mercados. Esta dinámica ha sido crucial para fortalecer el atractivo de instrumentos que faciliten la entrada de nuevos capitales.
La prueba piloto en Londres será clave para determinar si la digitalización logra convertirse en un complemento viable al sistema de transacciones físicas. Si logra escalar, el esquema podría replicarse en otros centros financieros y dar lugar a un modelo híbrido donde el oro mantenga su respaldo tangible, pero se comercialice con la flexibilidad de los activos digitales.
El World Gold Council no ha entregado más detalles sobre el alcance del proyecto ni sobre la tecnología que soportará la infraestructura digital.