El concepto de minería de criptomonedas ha atraído a varios inversores a lo largo de los años. A pesar de que está prohibido en varios países, los usuarios siguen observando su margen de beneficios y operan bajo el radar. Con el tiempo, las autoridades han impuesto ciertas restricciones a la minería de criptomonedas, así como al comercio. Pero últimamente, parece que las medidas más duras perjudicarán al departamento de minería. Nueva York encabeza la lista de lugares donde las autoridades pretenden regular la minería de bitcoin.
Recientemente, los legisladores de Nueva York se adelantaron a aprobar un proyecto de ley que pretende prohibir las operaciones de bitcoin que dependan de recursos energéticos basados en el carbono. La gobernadora Kathy Hochul podría firmar el proyecto de ley o desestimarlo en los próximos días. En caso de que Hochul firme el proyecto de ley, Nueva York podría acabar convirtiéndose en el primer estado de Estados Unidos en imponer una prohibición a la infraestructura de la tecnología blockchain.
La medida de Nueva York contradice la regulación de la minería de bitcoin de otros estados
El principal punto de preocupación de la minería de bitcoin es la mayor huella de carbono del estado de Nueva York. El objetivo básico es reducir y controlar la descarga de carbono mediante la represión de determinadas centrales eléctricas. Estas centrales dependen de la electricidad producida por la quema de combustibles fósiles.
En la actualidad, Estados Unidos alberga casi el 38% de las operaciones de minería de Bitcoin. Esto lo convierte en el actor más importante de la industria de las criptomonedas. Por lo tanto, esta medida podría afectar a los mineros de todo el país. Las autoridades afirman que están tratando de pasar a la energía sostenible. El proyecto de ley apunta categóricamente a las operaciones de minería que utilizan el mecanismo de consenso Proof-of-Work. El mecanismo de minería PoW pide más energía para sostener el equipo.
Hay un número considerable de personas que están expresando su desagrado hacia el proyecto de ley. Creen que, en última instancia, impondrá un efecto adverso en la economía. Otra razón por la que están en contra del proyecto de ley es el hecho de que la minería de Bitcoin sirve de base para la provisión de puestos de trabajo altamente remunerados y de alta calidad para las comunidades locales. Los mineros veteranos de Bitcoin creen que Nueva York es un estado hostil para llevar a cabo la minería y que es «inútil ir a una región que no te quiere».
Sin embargo, estados como Carolina del Norte, Georgia y Texas imponen menos restricciones y se han establecido como importantes destinos mineros. Texas tiene varias redes eléctricas desreguladas, así como legisladores favorables a las criptomonedas. La actitud amistosa del estado hacia los mineros hace que la industria sea bastante estable en la región. Pero Nueva York está dando un ejemplo decepcionante para que otros estados lo sigan.
