Lamentablemente el cibercrimen avanza a igual paso que la tecnología. El ataque a través del ransomware WannaCry sigue dejando secuelas que son debidamente rastreadas. En este momento se habla del movimiento de los fondos que los criminales causantes de dicho ataque han ido realizando. Según lo anterior, se ha detectado que están en movimiento alrededor de 143.000 $.
El 3 de agosto, CNBC informó que los hackers responsables del ataque habían retirado bitcoins escondidos en varias carteras que contenían alrededor de 52,2 BTC. El balance de todas las carteras que solían contener el monto robado del ataque de ransomware ahora es cero.
Este retiro era casi seguramente un intento de convertir el bitcoin pagado por las víctimas del ataque de WannaCry en una moneda digital diferente con características anónimas completas y de mejores prestaciones. Este es un movimiento obvio para evitar ser rastreados por las autoridades.
Se cree que algunos de estos fondos se están convirtiendo en Monero, una criptomoneda centrada en la privacidad como principal punto fuerte.
En mayo, un grupo de hackers llevó a cabo uno de los mayores ataques cibernéticos hasta el día de hoy. Los piratas informáticos estaban pidiendo un rescate de 300 $, y aunque algunas de las víctimas no pagaron nunca esa cantidad, los piratas informáticos fueron capaces de saquear alrededor de 143.000 $, que ya han sido rastreados. El ataque incluso hizo que el precio de bitcoin bajara de 1,848.75 $ a 1,644.64 $ en esos días.
De acuerdo con BlockSeer, una empresa de análisis blockchain, los hackers utilizaron Shapeshift para convertir bitcoin en Monero. El servicio de intercambio criptográfico suizo declaró que está trabajando con la policía para ayudar a capturar a los perpetradores.
Muchos investigadores han atribuido el ataque WannaCry a unos hackers de Corea del Norte, mientras que otros creen que podría haber venido de los bajos fondos de los foros de la deep web o incluso hackers aficionados. Sin embargo, todavía no está claro quién es el verdadero culpable detrás del ataque de ransomware Wannacry.
El ataque de ransomware de WannaCry fue efectivamente un gran golpe en general, porque de nuevo trajo la moneda digital a la luz como una herramienta perfecta para el delito cibernético. Por otro lado, también pone a los gobiernos y las autoridades en un estado de alerta elevado, conduciéndolos a reaccionar legislando de tal manera que puedan convertirse en un obstáculo ineludible para el desarrollo del ecosistema criptográfico global.
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