Puntos clave de la noticia:
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El informe anual de BlackRock proyecta una deuda federal superior a $38 billones en 2026 y plantea un escenario de vulnerabilidad estructural.
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La firma afirma que bitcoin y otros activos digitales reemplazan a los bonos largos como reserva alternativa ante el deterioro persistente de la renta fija.
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El reporte sitúa a la tokenización y a las stablecoins como la base operativa de un sistema financiero que avanza hacia una infraestructura programable.
BlackRock publicó su informe anual de inteligencia artificial y delineó un escenario donde la economía estadounidense entra en una fase de vulnerabilidad estructural que modifica el comportamiento de los grandes gestores de capital.
El documento proyecta que la deuda federal superará los $38 billones en 2026 y que este nivel de endeudamiento altera los incentivos de Wall Street, porque los bonos del Tesoro pierden capacidad para proteger carteras frente a shocks de inflación, variaciones bruscas en los rendimientos y tensiones fiscales difíciles de absorber.
El informe sostiene que el deterioro del mercado de renta fija obliga a las instituciones a revisar sus modelos de cobertura. BlackRock plantea que bitcoin y otros activos digitales empiezan a cumplir una función que antes ocupaban los bonos a largo plazo: actuar como una reserva alternativa ante la fragilidad del balance del gobierno. La firma recuerda que sus propios ETF de bitcoin ya superan los $100 mil millones bajo gestión y se convirtieron en uno de sus motores de ingresos más importantes, una señal concreta de que el flujo institucional hacia el mercado cripto ya no es marginal.
BlackRock: La Tokenización Será un Eje Central del Sistema Financiero
El texto también ubica a la tokenización como un eje central para el sistema financiero de la próxima década. BlackRock afirma que un mercado tokenizado ofrece una infraestructura más eficiente para el crédito privado, la gestión de activos y liquidación de valores. Larry Fink define este proceso como la transición natural hacia una arquitectura financiera donde cada activo puede integrarse en una red programable. Según el informe, la tokenización avanza porque resuelve problemas de transparencia, costos operativos y velocidad que hoy frenan a los mercados tradicionales.
El Rol de las Stablecoins y el Futuro de la Minería de Bitcoin
Las stablecoins ocupan otra parte importante del análisis. Para BlackRock, dejaron de ser instrumentos de nicho y funcionan como un enlace operativo entre bancos, fondos y mercados onchain. Samara Cohen, responsable global de desarrollo de mercados, describe a estas monedas como la vía que convierte la liquidez tradicional en liquidez digital sin fricciones innecesarias y con una adopción que crece por necesidad, no por moda.
El reporte también conecta la expansión de la IA con la industria minera de bitcoin. La demanda de centros de datos impulsada por modelos de alta capacidad está trasladando valor hacia las compañías con acceso a energía y hardware especializado. BlackRock calcula que la infraestructura de IA podría consumir hasta el 20% de la electricidad estadounidense para 2030, esto permite a los mineros diversificar sus ingresos alquilando capacidad a empresas tecnológicas además de minar BTC.
Para BlackRock, los límites entre las finanzas tradicionales y los activos digitales se están volviendo difusos. La firma no presenta la adopción cripto como un fenómeno especulativo, sino como una respuesta directa a la fragilidad fiscal y a la reconfiguración del sistema financiero global.
