El Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DOJ) ha presentado una moción para impedir que los siete testigos expertos propuestos testifiquen en el juicio de Sam Bankman-Fried, el deshonrado fundador y ex director ejecutivo del exchange de criptomonedas en quiebra, FTX. El argumento del DOJ se basa en la insuficiencia de sus revelaciones, la posibilidad de información engañosa y la relevancia de su testimonio previsto.
El DOJ pone a los expertos de SBF bajo escrutinio
La moción del DOJ, presentada el 28 de Agosto, es en respuesta a la propuesta del equipo de Bankman-Fried de testigos expertos para testificar en su nombre. El DOJ impugna estas selecciones por diversos motivos. Algunos expertos, como Lawrence Akka, un abogado británico, han sido considerados inapropiados debido a la naturaleza de sus opiniones propuestas, que podrían inmiscuirse en la jurisdicción del tribunal.
Otros expertos, como Brian Kim y Thomas Bishop, carecen de detalles específicos sobre sus testimonios previstos, lo que los hace inapropiados según los estándares legales.
El escrito del DOJ también enfatiza la redundancia de ciertos testimonios de expertos. Por ejemplo, la experiencia de Bradley Smith en la ley de financiación de campañas se considera irrelevante, ya que la acusación que él tuvo no está relacionada con la de Bankman-Fried y sus cargos de financiación de campaña.
Además, el DOJ argumenta contra el testimonio de Joseph Pimbley sobre el código de FTX, afirmando que los testigos directamente involucrados en la redacción del código pueden ofrecer suficientes conocimientos.
Expertos en servicios financieros y su idoneidad
El DOJ plantea preocupaciones sobre la experiencia de los expertos en la industria de servicios financieros Peter Vinella y Andrew Di Wu. Argumenta que su testimonio puede no estar directamente relacionado con los problemas en disputa en el juicio. Además, sostiene que parte de su testimonio previsto podría considerarse impropio o irrelevante.
Como resultado, el Departamento de Justicia insta al tribunal a ejercer su «autoridad de control» para evitar estos testimonios de expertos, afirmando que algunas de las opiniones propuestas podrían aventurarse en conclusiones legales, inmiscuyéndose en las responsabilidades del tribunal y del jurado.
En contraste con los testigos expertos en disputa, el DOJ planea confiar en sus propios testigos, Gary Wang y Nishad Singh, que participaron en la redacción del código de FTX. Estos testigos son considerados competentes para responder a las preguntas relevantes, lo que hace innecesaria la necesidad de un testimonio de expertos separado sobre el asunto.
Mientras tanto, el juicio de Sam Bankman-Fried está programado para comenzar el 3 de Octubre. El fundador de FTX enfrenta varios cargos relacionados con el fraude y la conspiración tras el colapso de su imperio.
