En el continente asiático las posiciones respecto a la tecnología blockchain y la criptografía han sido particularmente muy encontradas. Desde las posturas oficiales permisivas como las de Japón, Tailandia o Singapur, hasta las posiciones más restrictivas como las de China o Corea del Sur, la criptografía ha creado mucho impacto. Sin embargo todo parece indicar que para la tecnología blockchain las cosas pueden florecer, ya que hasta Corea del Sur comienza a mostrar signos de mayor apertura.
Esta nueva postura de apertura es ya algo oficial, y se pudo conocer mediante el medio de comunicación local Yonhap News, en el cual se expuso que el gobierno de Corea del Sur destinará cuatro mil millones de won coreanos (el equivalente a 3.500.000 $) para desarrollar lo que denominó como una «planta de energía virtual» basada en tecnología de blockchain.
La planta de energía virtual (VPP) que se desarrollará será una red descentralizada basada en la nube de unidades de generación de energía renovable, tales como parques eólicos y parques de paneles solares, que funcionarán como una sola planta de energía utilizando la energía inactiva de múltiples fuentes de energía distribuidas.
Las autoridades de la ciudad de Busan, la segunda ciudad más importante de Corea del Sur, propusieron el interesante proyecto. Pero no se trata sólo de una iniciativa pública, sino que también formarán parte de este proyecto empresas como Nuri Telecom, Busan City Gas, la Corporación de Complejo Industrial de Corea y la Universidad Nacional de Pusan.
El proyecto está pensado para hacer por una parte, un uso inteligente y económicamente viable, a la vez que ecológicamente enfocado en el uso de energía natural renovable, implementando tecnología blockchain, y aprovechando las características de esta tecnología para involucrar a particulares de una manera descentralizada, pues cada comerciante de energía podrá ver datos y mejorar la previsión y el comercio de energías renovables.
Con esta planta de energía virtual se busca reducir la demanda de consumo de energía durante las horas pico y redistribuirla a áreas más necesitadas, lo que también puede disminuir la dependencia de las fuentes de energía tradicionales y a su vez minimizar el impacto ecológico negativo.
Por otra parte el proyecto podría ser el trampolín para que la ciudad de Busan se posicione como el centro de la blockchain de Corea del Sur, en una clara competencia con la capital Seúl.
En cuanto al área del proyecto de energía renovable, en Corea del Sur tienen ya claro que el futuro de la industria energética se desarrollará de la mano de tres tendencias significativas, y éstas son digitalización, descarbonización y descentralización, aspecto último este en el que la tecnología blockchain lo hace posible.
La política de adopción de la tecnología blockchain está formando parte de la cotidianeidad de Corea del Sur. No se trata sólo del proyecto de energía renovable aquí reseñado, sino que además, las dependencias del gobierno de Corea del Sur están comenzando a implementar soluciones basadas en tecnología blockchain en áreas como hospitales, cadenas de suministro de carne y otros insumos alimenticios, e incluso la industria de satélites.
Corea del Sur con estas iniciativas se suma a sus vecinos asiáticos en la tendencia de adopción de la tecnología blockchain a nivel de soluciones masivas.