Un estudio realizado por el Instituto para el Valor de las Empresas de IBM, titulado «Creando confianza en el gobierno», reveló que la mayoría de los funcionarios públicos que participaron en dicho estudio probablemente seguirán el desarrollo de la tecnología blockchain en 2017 y 2018. La encuesta abarcó a 200 líderes gubernamentales de 16 países.
Se supo por medio de dicho estudio que las agencias gubernamentales buscarán la aplicabilidad de la tecnología blockchain en los campos de gestión de transacciones financieras, gestión de activos, gestión de contratos y cumplimiento normativo, centrándose en las características inmutables y transparentes de la tecnología blockchain.
El 90 por ciento de los líderes gubernamentales creen que la cadena de bloque tendrá mayor impacto en el cumplimiento legislativo ya que los sistemas e infraestructura actuales establecidos para hacer cumplir las leyes son ineficientes en términos de tiempo, costo y mano de obra.
El reemplazo de los sistemas reguladores y gubernamentales de TI están siendo priorizados por organizaciones gubernamentales y líderes estadounidenses a nivel nacional. Para 2018, los gobiernos esperan recortar los costos de hacer cumplir las regulaciones con plataformas de bloques autónomas y eficientes.
Uno de los problemas que las agencias gubernamentales están enfrentando debido a sistemas y servidores ineficientes de procesamiento de datos, es la facilitación de información entre múltiples partes. La mayoría de los organismos gubernamentales interactúan con organizaciones o empresas del sector privado, transmitiendo grandes cantidades de datos.
Funcionarios consultados en este estudio creen que la implementación de la tecnología blockchain, los contratos inteligentes y las marcas de tiempo pueden disminuir significativamente los riesgos y costos involucrados en el mantenimiento de bases de datos compartidas.
Por el momento, el enfoque del gobierno de los Estados Unidos en la tecnología blockchain gira en torno a cuatro aspectos clave: Los servicios a los ciudadanos, el cumplimiento normativo, la gestión de identidades y la gestión de contratos, que requieren inmutabilidad y transparencia.
Eso significa que el gobierno de los Estados Unidos tiene que estudiar el desarrollo de una cadena de bloques descentralizada que priorice la seguridad y la inmutabilidad. La formación de una cadena de bloques centralizada o de un libro de contabilidad autorizado simplemente reproducirá la estructura de las bases de datos que las agencias gubernamentales ya tienen en su lugar.
Para que el gobierno estadounidense vea el desarrollo y la implementación de sistemas basados en cadenas de bloques, debe seguir el camino de la Autoridad de Conducta Financiera (FCA, por sus siglas en inglés) del Reino Unido y ofrecer a las empresas locales la posibilidad de probar sus tecnologías a escala comercial.
BTCManager, el 9 de febrero, aprobó la aprobación de Tramonex, una sucursal de bloques de Londres, que permite a la compañía operar como un pequeño emisor y facilitador de dinero electrónico.
Los funcionarios del gobierno deben colaborar con las empresas iniciales y los desarrolladores para superar obstáculos como la seguridad, la transparencia y la inmutabilidad para asegurar un camino hacia un gobierno más abierto y eficiente, impulsado por la tecnología blockchain.
