Su mercado alcanza una capitalización de 324.000 millones de dólares al cierre de 2017
Una de las primeras ideas que cualquier inversor debe tener en cuenta a la hora de entrar en el mercado de los cripto activos o criptodivisas, como algunos inicialmente lo han llamado, es precisamente la denominación de estos activos financieros. Esa es una clave para poder entender el subyacente y, por tanto, el mejor instrumento financiero para invertir en él.
Quizás la mejor idea al respecto es valorar el hecho de que son las plataformas de Forex, las que ofrecen instrumentos financieros para invertir en el mercado de divisas, las mejor posicionadas para entrar en estos nuevos activos financieros. La clave está en los CFD o contratos por diferencia que ofrecen estas plataformas y que son los más indicados para esta nueva clase de activos.
Los economistas tienen una definición muy estricta de lo que puede ser denominado dinero o divisa y pasa obligatoriamente por cumplir cuatro requisitos: Debe ser un medio de intercambio, debe ser una unidad de cuenta, debe almacenar valor y ser una oferta legal. Y de momento, ninguna de las monedas alternativas o cripto monedas reúne estas características, por lo que no son ni dinero (o moneda) de uso corriente ni divisa del forex.
En primer lugar, ninguno de estos activos es una forma de pago ampliamente aceptada. En segundo lugar, excepto para algunos intercambios en el mundo cripto, sólo unos pocos individuos o empresas expresan el valor de las cosas en este tipo de monedas alternativas. Los precios siguen dándose en monedas de curso legal e, incluso, no hay cruces entre ellas en el Forex y sus precios son siempre contra monedas consolidadas.
El tercer aspecto es que los precios de estos activos cambian tanto que no se los puede considerar como un instrumento para almacenar valor. Y, por último, y quizás el aspecto más claro y relevante, ninguna de las monedas alternativas es una oferta legal, pues no están reconocidas ni controladas por ningún estamento público y las ICOs u ofertas iniciales de monedas son siempre operaciones privadas, ajenas a mercados regulados como es el Forex.
Por estas cuatro razones, los economistas prefieren acuñar el término cripto activos, incluso cuando nos referimos a la principal moneda virtual por antigüedad y capitalización de todas ellas, el bitcoin, lo que no desmerece el enorme valor de mercado que han alcanzado en tan poco tiempo.
A cierre de 2017, el mercado de los cripto activos supone 324.000 millones de dólares frente a los 10.5000 millones de dólares que capitalizaba a primeros de 2014, pero las cinco monedas más conocidas (bitcoin, ethereum, ripple, bitcoin cash y litecoin) suponen más del 70% del total. Nada, si lo comparamos con el mercado del Forex, bonos o acciones.
En marzo de 2018, se estima que los cripto activos bajo gestión en todo el mundo son entre 2.000-3.000 millones de dólares, lo que hace pensar que, a pesar de todo este ruido, el mercado todavía no les ha hecho mucho caso. En los mercados de futuros la media diaria es de 150 millones desde su creación en diciembre de 2017. Por eso, el instrumento favorito para entrar en estos activos son los derivados que ofrecen las plataformas de forex.
