Las monedas virtuales cada vez se acercan más a ser el método de pago del futuro. Están cambiando los negocios, la cultura financiera y el mundo bursátil, gracias a ellas cualquier persona que tenga acceso a internet puede aprovecharse de sus beneficios.
Como algunos gobiernos están en curso de aceptar las criptomonedas como forma de pago y son un medio alternativo que ofrece grandes ventajas, creemos que es importante que conozcas algunas de estas monedas digitales y cómo funcionan de una forma más detallada.
¿Qué son las monedas virtuales y cómo surgieron?
Las criptomonedas, monedas digitales, virtuales o criptodivisas, nacieron en 2009 y según estudios realizados, en 2017 casi se alcanzaban los 3 millones de usuarios de monedas virtuales y en 2019 se estima que llegaron a los 25 millones de personas que poseen BTC.
Por lo que podría decirse que ha dejado de ser una moda, para convertirse en una realidad, tras demostrar su potencial año tras año han dejado claro que vinieron para quedarse.
Una moneda virtual es independiente y está descentralizada, puesto que no está controlada por ningún Estado, institución financiera, banco o empresa centralizada.
Se trata de una divisa intangible, aunque puede ser utilizada como medio de pago igual que el dinero físico.
Según el Banco Central Europeo, la moneda virtual es:
“un tipo de dinero digital no regulado, el cual es emitido y generalmente controlado por sus desarrolladores, y usado y aceptado entre los miembros de una determinada comunidad virtual”.
¿Cuáles son las monedas virtuales más comunes?
Aquí podrás conocer algunas de las monedas virtuales más importantes que existen a día de hoy, en qué consisten y cómo funcionan.
1. Bitcoin
Es de todas las monedas virtuales la más famosa, valiosa y extendida del mundo, entre otras cosas porque fue la primera en aparecer.
Bitcoin apareció en 2008 pero hasta el 2009 no empezó a estar en funcionamiento, su creador es conocido como Satoshi Nakamoto, nadie sabe quién es, si es una persona o un grupo de personas, se ha especulado mucho al respecto, incluso varias personas han querido hacer creer que eran Nakamoto aunque ninguno lo ha demostrado finalmente.
Satoshi Nakamoto el creador de bitcoin
Satoshi Nakamoto no solo creo uno de los mayores avances tecnológicos de las últimas décadas, sino que además lo regaló al mundo dejándolo en OpenSource (Código abierto) para que cualquiera pueda revisarlo, modificarlo y mejorarlo.
Bitcoin es una moneda digital, como el Euro o el Dólar, con la que podrás realizar todo tipo de compras en aquellos comercios que acepten dicha divisa.
Las operaciones se pueden realizar bien desde dispositivos móviles como el Smartphone o la Tablet o bien, desde el ordenador de escritorio.
No es una moneda física pero al fin y al cabo, como todas las monedas de curso legal se puede intercambiar, por lo que siempre podrás optar a cambiar tus Bitcoins por euros, dólares o cualquier otra moneda fiduciaria.
Y es que, mientras que en sus inicios el precio de esta criptomoneda no alcanzaba el dólar, con el paso de los años su valor ha ido en aumento.
¿Cómo funciona Bitcoin?
Para comenzar a utilizar estas monedas virtuales lo primero que necesitamos es un Wallet, que hará la misma función que una cartera física (guardar nuestro dinero).
Esta wallet consiste de un código alfanumérico y tiene unas claves de acceso para poder acceder a ella y realizar pagos, si perdemos estas claves perdemos TODO lo que hay en el, es por ello que siempre es conveniente crear copias de seguridad de nuestras claves en diferentes lugares para evitar problemas.
Una vez tenemos nuestra wallet, las claves y Bitcoin en ellas el uso es sencillo, tan solo deberemos decir a que dirección de wallet y que cantidad de monedas virtuales queremos enviar, una vez hecho esto solo hay que esperar que se realicen las confirmaciones del envío y habremos hecho nuestra transacción.
Todas estas transacciones se reflejan en la Blockchain o Cadena de bloques, que vendría a ser un libro de registros permanente, donde se anotan todas y cada una de las operaciones realizadas con esta criptomoneda.
2. Ethereum [ETH]
Lo primero de todo, es aclarar que ETH es la criptomoneda, y el Ethereum es la red o sistema que la controla.
Actualmente se trata de la segunda criptomoneda más importante de todas las monedas virtuales.
Ethereum se basa en una red de intercambios de valor monetario con la característica de no tener ninguna autoridad central que gestione el control, dejándolo todo en manos de los usuarios.
Al mismo tiempo es una plataforma OpenSource (Código abierto) para la creación de contratos inteligentes o tokens.
¿Cómo funciona ETH?
Permite a usuarios o empresas firmar contratos inteligentes (Smart Contracts) sin comisiones ni control por parte de ninguna organización centralizada y con total confianza de cumplimiento.
Por ejemplo, empresas o usuarios pueden firmar Smart Contracts desde cualquier lugar del mundo, sin comisiones ni control por parte de ningún estado, ya que solo están controlados por sistemas informáticos descentralizados.
Esto ofrece un alto grado de seguridad, aunque la mayor ventaja de estos contratos es que no necesitas confiar en la contraparte, ya que este se resolverá de forma automática si las condiciones son las acordadas.
Un ejemplo sería uno en el que dos partes acuerdan un contrato por el que alguien ofrece sus productos o servicios a cambio de ETH y en el momento en el que se materialice, el contrato dará el producto y el dinero a las partes correspondientes.
3. Ripple [XRP]
Ripple es conocida y considerada como la moneda de los bancos, siendo completamente centralizada alejándose de la idea original del resto de monedas digitales.
Es un sistema virtual de pagos en tiempo real, utilizado por las instituciones financieras como una forma más rápida y económica que otras metodologías, abaratando los costes internos de operativas, ya que permite enviar y recibir dinero o liquidar transacciones en menos de 5 – 10 segundos. Mucho más rápido que el Bitcoin.
¿Cómo funciona Ripple (XRP)?
Como ya hemos dicho antes, el objetivo principal de Ripple es permitir que las personas utilicen los servicios financieros sin retrasos o tarifas excesivas.
Es decir, que el dinero «fluya libremente», resolviendo el problema de las instituciones y bancos que dificultan el flujo de dinero con altas comisiones y retrasos en el proceso a los usuarios.
4. Litecoin [LTC]
Como muchas otras criptomonedas, Litecoin se creó a partir del código de Bitcoin, fue creada por Charlie Lee en 2011 y su funcionamiento es muy similar a esta moneda digital ya que ambas son métodos de pago virtual.
¿Cómo funciona Litecoin?
Litecoin permite recibir y enviar pagos en tiempo real a todo el mundo. Al fin y al cabo, su finalidad es la misma que la de su hermano mayor, Bitcoin.
Las mayores diferencias entre ambas son que las transferencias de Litecoin son más rápidas y sus fees (honorarios que se cobran al hacer transferencias) son menores.
La fuerza de los criptovalores viene dada por el número de transacciones realizadas y el porcentaje de personas que lo utilizan.
5. Monero [XMR]
Monero [XMR] cuyo origen data de 2014, es una de las monedas virtuales que a diferencia del Bitcoin es famosa por ser completamente anónima y privada.
Para ello, utiliza un cifrado inaccesible llamado Cryptonote para garantizar que nadie pueda saber cuánto dinero tienes o cómo lo gastas. Incluso oculta la dirección de la billetera aunque esta sea conocida.
Se trata de un tipo de divisa virtual que todo el mundo puede utilizar y que cuenta con un sistema de seguridad completamente fiable.
¿Cómo funciona Monero?
La moneda digital funciona más o menos como sus rivales en el mercado. Es decir, permite la realización de transferencias de dinero de una manera bastante rápida y barata en todo el mundo.
Entender qué es Monero y cómo funciona es más fácil si se observan los tres pilares de la tecnología utilizada por este sistema: seguridad, privacidad y descentralización.
- Seguridad: Este es uno de los requisitos fundamentales de las transacciones con divisas virtuales, ya que al igual que queremos seguridad al tener nuestro dinero en un banco, queremos seguridad al tener nuestras criptomonedas en una wallet, esto es algo sobre lo que se está trabajando día a día y donde los creadores y desarrolladores de criptomonedas ponen todo su esfuerzo para mejorar, pero nada es 100% seguro, al igual que pueden robar en un banco, pueden atacar o hackear una wallet virtual, es el usuario el que debe hacer lo posible por mantener sus claves privadas a salvo, utilizar wallets frías y aumentar sus niveles de seguridad.
- Privacidad: La privacidad es fundamental para la comunidad y para los desarrolladores. A diferencia de lo que ocurre con las monedas virtuales como Ethereum, las transacciones son completamente privadas, tanto en las partes involucradas como en los importes, por lo que son transacciones irrastreables.
- Descentralización: con Monero no hay necesidad de depender de nadie más en la red. La moneda digital funciona a través del algoritmo de Prueba de Trabajo (proof of work) y no permite su desarrollo en dispositivos ASIC, por lo que no admite la centralización de minería en grandes grupos mineros como ocurre por ejemplo con Bitcoin.