Puntos clave de la noticia
- Adam Kobeissi prevé un Bitcoin a $200,000 en 24 meses impulsado por condiciones macroeconómicas únicas.
- La divergencia en la Reserva Federal y el gasto tecnológico crean un escenario de estanflación favorable para activos duros.
- La brecha de riqueza se amplía: excelente panorama para propietarios de activos, pero sensación de recesión para el resto de la economía.
El mercado podría estar entrando a su mejor fase de inversión para activos digitales y bienes tangibles, por lo menos es lo que un destacado analista de Wall Street alertó recientemente.
El fundador de The Kobeissi Letter, Adam Kobeissi, dijo en conversación con Anthony Pompliano que, la inusual convergencia de recortes de tasas de interés dentro de un entorno de estanflación, sumado a un gasto corporativo sin precedentes, está creando las condiciones ideales para una apreciación nominal masiva de los activos.
La tesis alcista de Kobeissi se apoya en una matemática contundente: las «Siete Magníficas» del sector tecnológico están inyectando actualmente más de 600.000 millones de dólares anuales en gastos de capital (CapEx). Según el analista, la consigna es «poseer activos o quedarse atrás».
En este contexto, su proyección para el mercado cripto es particularmente agresiva, estimando que Bitcoin podría alcanzar los 200.000 dólares en los próximos 12 a 24 meses. Para Kobeissi, la volatilidad actual es irrelevante frente a la tendencia macro, consolidando a BTC como un protagonista indiscutible en esta mejor fase de inversión para activos digitales.

Estanflación y la división de la Reserva Federal
El motor detrás de este pronóstico es la fractura interna en la Reserva Federal, la más significativa durante el mandato de Jerome Powell. Los funcionarios se encuentran divididos entre combatir una inflación persistente que supera el 3% o apoyar un mercado laboral que se debilita con un desempleo rozando el 5%.
Esta incertidumbre, agravada por la falta de datos oficiales debido al reciente cierre del gobierno, ha complicado la hoja de ruta de los recortes de tasas, fomentando un escenario de estanflación que históricamente beneficia a los activos de refugio y riesgo por igual.
Recalca Kobeissi una dualidad económica cruda: mientras el S&P 100 ha subido casi un 40% desde abril, gran parte de la población percibe una recesión. Esta brecha de riqueza confirma su teoría de que, si bien estamos ante la mejor fase de inversión para activos digitales y acciones para quienes ya poseen capital, la economía real enfrenta presiones severas.
Concluye que, en este ciclo, la protección del patrimonio mediante activos duros como Bitcoin, oro y bienes raíces no es solo una opción, sino una necesidad financiera ante la devaluación monetaria y el estímulo fiscal.