El gobierno de Venezuela busca darle algo de tracción a su controvertida criptomoneda, el Petro, y quizás podría lograr algo si la India acepta su oferta: un 30% de descuento en compras de petróleo, sólo si es adquirida con la moneda digital respaldada por este hidrocarburo.
Un grupo de representantes de la institución blockchain venezolana viajó al país surasiático el mes pasado, donde lograron cerrar un acuerdo con Coinsecure, una plataforma de criptocomercio radicada en Delhi, para vender tokens de Petro dentro de ese territorio.
Mohit Kalra, director ejecutivo de Coinsecure, dijo que el país caribeño estaba buscando enlistar su criptoactivo en dicha plataforma, de modo que pudiera ser comerciado con otras monedas digitales o fiduciarias, como el Bitcoin y la Rupia. Según Kalra, los venezolanos estarían de gira por varios países haciendo ofertas relacionadas a su criptomoneda. Para la India, la propuesta fue la siguiente: ellos obtienen un 30% de descuento en petróleo, con la condición de que el mismo sea adquirido mediante las petromonedas.
Adicional a ello, la plataforma de criptocomercio les facilitaría soluciones de etiqueta blanca, es decir, ellos se convertirán en el único exchange donde se podría cambiar Petros por otras divisas virtuales. “Será identificada con su marca, pero nosotros seremos el servidor. Planeamos proveerlos con entre 10 y 15 criptomonedas,” dijo Kalra.
La fuente hace mención a una conversación que tuvo con el viceministro de hidrocarburos de Venezuela, Ángel González, en donde éste les comenta que el Petro sería lanzado tras las elecciones presidenciales de su país, las cuales están pautadas para el 20 de mayo. “Esperamos un gran interés (en el Petro) por parte de países como India,” .
Generando controversia
Incluso desde su concepción, el Petro ha estado en el centro de debate por sus orígenes, y su futuro. Lo primero que suelen señalar los analistas y expertos del mundo de las criptomonedas es el hecho de que ella es una moneda centralizada, lo que va en contra de los principios de otras monedas virtuales como el Bitcoin y Ethereum, las cuales son totalmente descentralizadas.
Otro problema que la acompaña es su emisión. El gobierno ha visto caer su popularidad en el transcurso de los últimos 4 años, perdiendo también su legitimidad ante la comunidad internacional. La forma en la que el Presidente Nicolás Maduro plantea la criptomoneda la coloca al mismo nivel de la fallida moneda de curso legal, el Bolívar, por lo que los expertos suelen explicar que sin la confianza necesaria, el Petro no podría ni siquiera despegar, pues nadie usaría una moneda que viene a sustituir otra que también es controlada por el mismo gobierno.
De hecho, es posible que esto último suceda, pues con la última ronda de sanciones impuestas por el gobierno de los Estados Unidos, las empresas internacionales y otros inversores no se sienten muy cómodos comerciando con una criptomoneda prohibida por Donald Trump.
