Puntos clave de la noticia
- El legislador Ko Ju-chun citó un inventario oficial que detalla la posesión de 210,45 BTC bajo control judicial.
- Las autoridades aclaran que estas tenencias son producto de decomisos criminales y no una reserva estratégica.
- Gráficos de TradingView sugieren que la reciente caída de BTC forma parte de un ciclo histórico repetitivo.
El sistema de justicia de Taiwán dio a conocer una cifra que capta la atención del ecosistema cripto global. El legislador Ko Ju-chun, indicó que el país mantiene bajo custodia aproximadamente 210,45 Bitcoin en activos incautados.
Esta información, basada en un inventario oficial del gobierno cerrado al 31 de octubre de 2025, aclara diversos rumores que circulaban en redes sociales sobre la supuesta propiedad estatal de criptomonedas.
Exactamente la cifra reportada por los fiscales es de 210,453 BTC, los cuales se encuentran bajo custodia judicial junto con otros activos virtuales confiscados en operativos contra el crimen.
Aunque la noticia se hizo viral rápidamente en plataformas como X como si fuera una nueva estrategia de inversión, expertos señalan que el origen de esta incautación es meramente procedimental y está estrictamente vinculado a investigaciones criminales en curso.
Procedimientos judiciales y análisis de ciclos de mercado
Cabe destacar que la posesión de estos activos incautados no señala un cambio en la política monetaria o criptográfica de Taiwán. Bajo el marco legal de la isla, estos activos digitales permanecen bajo control judicial hasta que los tribunales decidan sobre su decomiso definitivo, restitución o disposición.
A diferencia de otras naciones que debaten la creación de reservas estratégicas, las tenencias de Taiwán son reactivas y dependen de los casos legales activos.
Paralelamente, el mercado analiza esta noticia bajo la lupa de la acción del precio. Un análisis reciente de TradingView destaca que el actual retroceso de la criptomoneda encaja en una estructura de ciclos repetitivos.
Son patrones que dividen la historia del activo en ventanas de tiempo específicas: una de 364 días vinculada a tendencias bajistas y otra de 1.064 días alineada con avances macroeconómicos.
En este contexto, los activos incautados por gobiernos se suman a la oferta potencial que los operadores vigilan mientras el mercado proyecta su próxima fase dentro de este cronograma cíclico.
