Puntos clave de la noticia:
-
Monero cayó fuertemente y ronda los $353, cortando una racha que duplicó su valor desde abril impulsada por expectativas regulatorias y técnicas.
-
El interés abierto en futuros subió 20% en ese mismo lapso y marcó su mayor nivel desde diciembre, reflejando mayor actividad en derivados pese a la baja.
-
Las tasas de financiamiento siguen positivas, lo que sugiere que gran parte del mercado mantiene posiciones largas, apostando por un rebote en el corto plazo.
Monero atraviesa una corrección brusca tras semanas de fuerte repunte. En solo tres días, su precio cayó de $420 hasta un piso $325. En este momento ronda los $353, registra un descenso del 9.5% en las últimas horas. Esto ha puesto fin a su racha alcista que lo llevó a más que duplicar su valor desde mediados de abril. El retroceso ocurre frente a las expectativas por una actualización técnica y cambios en el marco regulatorio de Estados Unidos que habían empujado su valor.
La caída no ha frenado el interés de los inversores. El volumen de contratos abiertos en futuros de Monero subió un 20% en ese mismo periodo, alcanzando su nivel más alto desde diciembre. Esta cifras muestran que hay una mayor actividad en el mercado derivados, ya que el interés abierto mide el número de contratos vigentes que no se han cerrado ni liquidado.
Lo habitual en estos casos sería asociar el aumento del interés abierto durante una baja de precios con una expectativa de descenso adicional. Sin embargo, las tasas de financiamiento en los futuros perpetuos de Monero siguen en terreno positivo. Este indicador señala el costo que asumen quienes mantienen posiciones apalancadas, y su valor positivo confirma que la mayoría apuesta por una recuperación, no por un desplome.
Monero se Prepara para Resistir el Embate de Tecnologías Cuánticas
Esto puede interpretarse como una estrategia de compra en retroceso. Muchos inversores están aprovechando la baja temporal para adquirir posiciones largas, anticipando un rebote en los próximos días. Esto se alinea con la tendencia que ha sostenido Monero desde abril y con el interés generado por la inminente actualización FCMP++, que promete mejorar su resistencia a tecnologías cuánticas y mejorar la privacidad de las transacciones.
La dinámica actual contrasta con la pausa observada en otras criptomonedas del mercado, incluida Bitcoin, que ha tenido cambios más moderados en el mismo periodo. Monero sigue siendo una opción atractiva para quienes priorizan el anonimato y el control sobre la información financiera,.
A corto plazo, el comportamiento del interés abierto y las tasas de financiamiento sugieren que buena parte del mercado espera un rebote. La evolución de su precio en los próximos días permitirá confirmar si este repunte se concreta o si la presión de venta persiste.