Después de 18 meses para resolver sus desacuerdos a través de un mediador por un tribunal de Tel Aviv, lamentablemente Elad Arad, y los hermanos Uriel y Daniel Peled vuelven a los tribunales. Estos últimos son fundadores de Orbs, una empresa de blockchain. Sin embargo, la expulsión de Elad Arad y sus acciones culminaron en la disputa.
En su demanda, Elad Arad está acusando a los hermanos de dejarlo atrás después de que los hermanos cerraron Cointree Capital, de la cual era parte como accionista. Mientras Cointree Capital se hundía, los hermanos crearon otras firmas en la misma industria pero Elad no formaba parte de ellas. En sus esfuerzos, Arad afirma que los hermanos cometieron enriquecimiento ilegal, conspiración, engaño y delitos graves de fraude.
Arad está acusando oficialmente a Uriel y Daniel Peled de negligencia, robo de secretos comerciales, incumplimiento de contrato e incumplimiento de compromisos. Del mismo modo, Arad también está denunciando la opresión de un accionista minoritario y un deber fiduciario. Junto a la empresa Orbs y sus socios fundadores, Arad también incluyó a Hexa Solutions, Hexa Labs, Microverse y Cointree Management en el caso judicial. Estos últimos aparecen en los documentos del caso debido a que los hermanos son socios en las empresas.
Aunque los documentos oficiales no indican cuánto está buscando Arad, según personas que cercanas al asunto, sus demandas podrían llegar a decenas de millones de dólares. Además de eso, Arad está buscando hacer su liquidación en 12 monedas virtuales diferentes. Algunas de las monedas incluyen Stox, Sirin, Orbs y Kin. Arad afirma además que los hermanos utilizaron los ingresos de sus exitosas ICO y transacciones con Kik, una empresa canadiense, para establecer las nuevas empresas.
A medida que los procedimientos judiciales toman forma, Orbs dijo lo siguiente sobre las reclamaciones de Arad:
«En primer lugar, las demandas de Arad no son notables. No hemos tenido tiempo de estudiar los documentos de reclamo desde que los recibimos al mismo tiempo que se distribuían a los medios y la prensa. Sin embargo, sus declaraciones no nos sorprendieron desde entonces. Están en línea con sus amenazas anteriores».
Con el caso ya en la corte, simplemente se suma a los problemas legales que enfrentan los hermanos. Kik una empresa con la que están asociados, está bajo el objetivo de la SEC.
