Puntos claves de la noticia:
- Se espera que la Reserva Federal anuncie un recorte de tasas el 10 de diciembre.
- Bitcoin sube hacia $94,500 antes de la decisión, ganando un 4%.
- Analista ve ruptura sobre $92,000 como señal de impulso hacia $100,000.
La Reserva Federal anunciará el 10 de diciembre su decisión sobre las tasas de interés en la última reunión del año, y el mercado cripto ya evalúa el posible impacto. Un recorte de un cuarto de punto aparece como la opción más probable al cierre del encuentro del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC). Sería el tercer ajuste de 2025, según esperan operadores y economistas.
La postura pública de Kevin Hassett, asesor económico de la Casa Blanca y candidato principal para asumir la presidencia de la Fed, ha reforzado esas expectativas. Durante el foro del WSJ CEO Council, Hassett afirmó que existe “amplio espacio” para reducir tasas.
Añadió que, si los datos lo permiten, la Fed podría continuar con esa línea. El comentario llega mientras el presidente Donald Trump renueva sus críticas al actual titular, Jerome Powell, a quien acusa de demorar los recortes.
Analistas observan los recortes de tasas y el posible avance de BTC hacia los $100.000
En paralelo, Bitcoin (BTC) volvió a avanzar en la jornada previa a la decisión del banco central. La moneda subió alrededor del 4% el 9 de diciembre, acercándose a los $94.500. El analista Michaël van de Poppe calificó el movimiento como “sólido” y señaló que el mercado seguía un escenario alcista, con un quiebre por encima de $92.000 que, según él, actuó como señal temprana del impulso actual.
Van de Poppe indicó que espera que BTC mantenga la zona de $91.500–$92.000 como soporte. Si logra sostener ese rango, afirmó que no ve razones para descartar una prueba de los $100.000 en la siguiente etapa.
La reacción al recorte podría amplificar ese avance, dado que el mercado suele asociar tasas más bajas con mayor liquidez disponible.
Mientras el debate continúa, BTC cotizaba cerca de $93.974 al momento de la publicación. El próximo anuncio de la Reserva Federal pondrá a prueba la relación entre condiciones monetarias y precios de los activos digitales, un vínculo que sigue presente en cada reunión del banco central y que vuelve a ganar fuerza en el cierre del año.
