La firma de tokens de seguridad suiza, BlockState, anunció recientemente que pasará media docena de tokens ERC-20 desde la plataforma Ethereum a Corda. Según se informa, se trata de una oferta destinada a abrir el mercado y emitir más tokens para inversores tanto minoristas como institucionales.
BlockState emitirá los tokens en Corda, una tecnología de repisa privada distribuida de R3. Esta última plataforma se está construyendo para Swiss Digital Exchange (SDX).
La emisión de los tokens en Corda se ha hecho posible a través de BlockState emitiéndolos como acciones de depósito globales, donde las acciones de la compañía se mantienen en otro país, mientras que el certificado de propiedad se utiliza para negociar en otro país en el mercado tradicional.
Además, la iniciativa anterior también tiene como objetivo reunir a los inversores y quitarles algo de carga. A través de la plataforma, los inversores no tendrán que lidiar con el manejo de una cartera, ya que SDX asumirá esa responsabilidad. En particular, los inversores minoristas no tendrán que trabajar con una institución financiera que esté conectada a un mercado secundario regulado. Sin embargo, podrán obtener los tokens ERC-20 en custodia.
BlockState ejecutará su primer programa piloto de oferta de tokens de seguridad en Corda
Mientras Corda contendrá los tokens ERC-20 de la plataforma Ethereum, BlockState también ejecutará su primera prueba de una oferta de token de seguridad a través de su propia oferta de tokens de seguridad (STO). Además hay otros cinco tokens programados para su emisión. Uno vendrá de la firma de música urbana y estilo de vida Streetlife, mientras que otros serán tokenizados del sector de energía sostenible e inmobiliario.
Además de emitir los tokens, BlockState también registrará los activos tokenizados como valores en Suiza. Una pregunta que surge es: ¿por qué BlockState eligió Suiza? En primer lugar, Suiza tiene un gran número de inversiones de alto patrimonio neto que están listos para comprar un activos digitales nuevos.
Aparte de eso, el entorno regulatorio en Suiza es más amigable en comparación con otros países. Además, la ley suiza del mercado de capitales se encarga de las acciones no certificadas.