Puntos clave de la noticia:
- La salida a bolsa de Kraken en 2026 podría atraer capital fresco de las finanzas tradicionales hacia el sector cripto.
- Expertos de Fidelity advierten sobre un posible «año de descanso» para Bitcoin, situando suelos locales cerca de los $65,000.
- Los flujos de «dinero inteligente» muestran un posicionamiento mayoritariamente corto, anticipando volatilidad a corto plazo.
Luego de que en octubre alcanzara su máximo histórico con $126,000, Bitcoin enfrenta una severa corrección marcada por liquidaciones masivas. En un contexto de incertidumbre, se ve una luz al final del túnel que significa una esperanza institucional: el impacto de la IPO de Kraken.
La plataforma, valorada recientemente en 20,000 millones de dólares tras una ronda de financiación de 800 millones, presentó documentos confidenciales para su debut bursátil en EE. UU., lo que muchos consideran un puente vital hacia las finanzas tradicionales (TradFi).
Dan Tapiero, CEO de 50T Funds, aseguró que el ciclo alcista no ha terminado. Para él, eventos como la salida a bolsa del exchange estadounidense pueden desbloquear fondos institucionales que han permanecido al margen.
Esta inyección de liquidez y legitimidad institucional podría ser el catalizador necesario para reactivar la demanda en un mercado que aún digiere las pérdidas de finales de año.
Visiones contrapuestas: ¿Es 2026 un año de pausa para Bitcoin?
No obstante, la cautela domina entre otros pesos pesados de la industria. Por su parte, Jurrien Timmer, de Fidelity Investments, ofrece una perspectiva menos entusiasta, sugiriendo que el impacto de la IPO de Kraken podría verse mitigado por los ciclos naturales del mercado.
Timmer proyecta que 2026 podría ser un «año de descanso» para Bitcoin, con el precio buscando soportes entre los $65,000 y $75,000, siguiendo el patrón histórico de fases bajistas de doce meses.
Ahora, los datos de Nansen refuerzan esta visión precavida al mostrar que el «dinero inteligente» está posicionado en corto en la mayoría de los activos principales. Aunque la expectativa por la IPO genera optimismo a largo plazo, el sentimiento inmediato está dominado por la volatilidad.
El éxito de Bitcoin para extender su ciclo alcista dependerá, en última instancia, de si la confianza que genera el impacto de la IPO de Kraken es suficiente para contrarrestar las presiones macroeconómicas y la rotación de liquidez que se espera para el próximo año.
