Chainlink, los creadores de Chainlink (LINK), ha integrado con éxito su Protocolo de Interoperabilidad, Chainlink CCIP, en Base, una nueva blockchain de capa 2 incubada por el exchange de criptomonedas Coinbase. Este movimiento, anunciado en un comunicado de prensa el 27 de Septiembre, abre un mundo de posibilidades para los desarrolladores, permitiéndoles aprovechar el poder de las aplicaciones y servicios de cadena cruzada.
Chainlink CCIP se Lanza en la Red Base
Esta integración de Chainlink CCIP en la red Base permite a los desarrolladores crear aplicaciones descentralizadas (dApps) capaces de alojar múltiples redes simultáneamente, facilitar transferencias de tokens entre cadenas e iniciar transacciones a través del uso de contratos inteligentes.
El protocolo CCIP aprovecha la reconocida red Oracle de Chainlink, que ya ha facilitado transacciones por un asombroso valor de $8 billones en valor en cadena. Esta asociación entre Chainlink y Base ejemplifica su compromiso compartido de impulsar la adopción dentro del ecosistema criptográfico a través de productos y servicios innovadores.
Johann Eid, Director de Negocios de Chainlink Labs, elogió la colaboración, enfatizando el potencial de CCIP y Base para marcar el comienzo de una nueva era de aplicaciones y servicios de cross-chain.
«La escalabilidad y la creatividad tecnológica de Base como solución de capa 2, combinadas con un número cada vez mayor de servicios de Chainlink, es una bendición para los desarrolladores que buscan construir la próxima generación de aplicaciones y servicios de cadena cruzada», afirmó Eid.
Además, Jesse Pollak, el creador de Base, compartió su entusiasmo por la integración, destacando cómo empodera a los desarrolladores y entusiastas de la blockchain para explorar nuevos casos de uso.
Hitos de Integración en Solo Tres Meses
Chainlink ha adoptado constantemente la innovación para expandir sus servicios Oracle a través de varios contratos inteligentes. La introducción de CCIP agregó capacidades de préstamos de cadena cruzada a la plataforma, lo que permitió a los usuarios pedir prestados y prestar activos virtuales en diversas redes.
Este protocolo ha estado en un rápido viaje de integración, con Base marcando su sexta incorporación a la red de Chainlink en menos de tres meses. Antes de este hito, el protocolo ya se había integrado en Ethereum, Arbitrum, Optimism, Polygon y Avalanche.
Además, el impacto de CCIP se extiende más allá de la criptoesfera. El mes pasado, Chainlink hizo titulares al colaborar con Swift, un importante servicio de mensajería interbancaria. Juntos, demostraron con éxito la interoperabilidad de la blockchain, conectando las redes financieras tradicionales con la tecnología de la blockchain.
El proyecto Chainlink también abordó las preocupaciones sobre la centralización al realizar cambios discretos en su configuración de firma múltiple. La red explicó que este ajuste era parte de su proceso regular de rotación de firmantes.
La integración de Chainlink CCIP en Base es un hito importante en la evolución de la interoperabilidad de cadena cruzada. Los desarrolladores ahora tienen una herramienta poderosa a su disposición para construir la próxima generación de aplicaciones y servicios de cadena cruzada. Les promete a los desarrolladores una interfaz segura y fácil de usar para crear aplicaciones que puedan comunicarse, transferir tokens y ejecutar acciones en diferentes blockchains.
