Puntos clave de la noticia:
- Arthur Hayes lanza Maelstrom Equity Fund I con una meta de $250 millones para adquirir empresas medianas de cripto.
- Cada operación oscilará entre $40 y $75 millones, enfocándose en firmas “off-chain” con flujo de caja sólido y sin tokens inflados.
- Aunque la inversión privada en cripto cayó a $1.4 mil millones tras la crisis de 2022, el repunte de 2025 y adquisiciones como las de Coinbase y Ripple refuerzan la visión de Hayes de consolidar compañías rentables y venderlas en un horizonte de cinco años.
Arthur Hayes, cofundador de BitMEX y figura influyente en el ecosistema cripto, prepara su regreso a gran escala. Su oficina familiar, Maelstrom, busca recaudar al menos $250 millones para lanzar su primer fondo de capital privado, con la intención de adquirir entre cuatro y seis empresas medianas del sector. El plan es ambicioso: invertir entre $40 millones y $75 millones por operación en compañías que ofrezcan infraestructura de trading, análisis de datos y servicios tecnológicos relacionados con los activos digitales.
El resurgimiento de Hayes y la apuesta por un sector en transformación
El proyecto, denominado Maelstrom Equity Fund I, estará registrado en Estados Unidos y apunta a captar el interés de inversionistas institucionales, fondos de pensiones y oficinas familiares. Según Akshat Vaidya, cofundador y socio gerente, el fondo busca atraer a quienes desean exposición al sector cripto sin contar con la experiencia técnica para gestionarlo directamente. Vaidya dirigirá el fondo junto con Hayes y el nuevo socio Adam Schlegel, con una primera ronda de cierre prevista para marzo y la meta total de recaudación para septiembre de 2026.
La estrategia marca un giro respecto a las inversiones previas de Maelstrom, que se enfocaban en tokens de startups. Ahora el fondo se centrará exclusivamente en capital accionario, apuntando a empresas “off-chain” con valuaciones más realistas. “No puedes inflar artificialmente el valor con un token no utilizado en el mundo fuera de la cadena”, explicó Vaidya, destacando la oportunidad de adquirir activos con múltiplos atractivos.
El contexto, sin embargo, es desafiante. Desde el colapso de FTX en 2022, la inversión de capital privado en firmas cripto cayó de $4 mil millones en 2021 a apenas $1.4 mil millones en 2025. Aun así, Hayes apuesta por un repunte sostenido, impulsado por un mercado en recuperación y por grandes adquisiciones recientes como la compra de Deribit por Coinbase ($2.9 mil millones) y la adquisición de Hidden Road por Ripple ($1.25 mil millones). El objetivo final: revitalizar empresas, mejorar su rentabilidad y venderlas a actores mayores en un plazo de cuatro a cinco años.