Puntos Clave de la Noticia
- Coinbase colaboró con el Servicio Secreto de EE.UU. en una rápida investigación, congelando 39 wallets y recuperando $225 millones en USDT robados, la mayor incautación de criptomonedas en la historia del Servicio Secreto.
- La operación desenmascaró una red de estafas románticas de «matanza de cerdos», donde los estafadores atraían a las víctimas a esquemas de criptomonedas falsos y les arrebataban los ahorros de toda la vida.
- Después de que Tether quemara los tokens incautados y reacuñara una cantidad equivalente, las autoridades se están coordinando con el FBI para devolver los fondos a las víctimas verificadas.
El 24 de junio, Coinbase, el cripto exchange, reveló su participación en la mayor incautación de criptomonedas jamás gestionada por el Servicio Secreto de EE.UU. Mediante la combinación de análisis en cadena y colaboración estratégica, Coinbase ayudó a recuperar $225 millones en USDT robados por una insidiosa red de fraude. Así fue el proceso.
El robo sin precedentes: $225 millones en criptomonedas
Las autoridades, que inicialmente se encontraron a finales del año pasado, congelaron 39 direcciones de wallets con aproximadamente $225 millones en USDT stablecoin de Tether. Considerada la mayor incautación de criptomonedas realizada por el Servicio Secreto hasta la fecha, esta acción marca un logro significativo en la lucha contra los delitos con activos digitales.
A mediados de junio, las autoridades presentaron oficialmente los documentos de decomiso civil para recuperar todos los tokens de los estafadores que agotaron los ahorros de toda una vida. Esta confiscación pone de relieve la creciente sofisticación de los delitos financieros cibernéticos y el papel fundamental que desempeñan los cripto exchanges como Coinbase en la preservación de la integridad del mercado.
Descifrando las estafas de «matanza de cerdos»
En el centro de este caso se encuentra la llamada «matanza de cerdos», una estafa de larga duración en la que los estafadores cultivan falsos vínculos románticos o comerciales en línea. Las víctimas, a menudo llamadas directamente o atraídas a través de las redes sociales, son persuadidas a invertir sus ahorros en oportunidades fraudulentas de criptomonedas.
Con el tiempo, las pequeñas devoluciones falsas generan confianza, lo que da lugar a transferencias mayores que desaparecen una vez que los estafadores han «masacrado» a sus víctimas hasta el último dólar. Esta manipulación emocional convierte al descuartizamiento de cerdos en uno de los fraudes de criptomonedas de más rápido crecimiento a nivel mundial.
Entre el 26 y el 29 de febrero de 2024, los analistas de Coinbase participaron en un «sprint de investigación» de varios días junto con agentes del Servicio Secreto. Equipados con herramientas blockchain propietarias y registros de cuentas obtenidos mediante citación judicial, rastrearon las transferencias ilícitas hasta sus billeteras de origen y detectaron actividades sospechosas.
Juntos, identificaron a más de 130 usuarios de Coinbase que, en conjunto, perdieron $2,3 millones, solo una fracción de los miles de estafados en múltiples plataformas de intercambio. Su análisis profundo de los metadatos de las transacciones también reveló rutas de lavado transfronterizas, lo que ayudó a mapear las redes que operan desde el Sudeste Asiático hasta Europa y más allá.
Tras la quema en cadena de Tether de los tokens incautados, se creó una cantidad equivalente de USDT nuevos y se depositó en una wallet controlada por el Servicio Secreto. Ahora, las autoridades se están coordinando con el Centro de Quejas de Delitos en Internet del FBI para devolver los fondos a las víctimas verificadas.