Recientemente el gigante de la industria de fabricación de componentes de minería, Bitfury, hizo una exitosa ronda de financiación privada para potenciar su crecimiento.
Bitfury se ha destacado como uno de los principales proveedores de infraestructura blockchain. Con sede en San Francisco, California, Bitfury acaba de cerrar con gran éxito su ronda de financiación de 80 millones de dólares, liderada por la firma de capital de riesgo Korelya Capital. Es uno de los momentos más significativos de financiamiento de alguna empresa blockchain este año.
La actividad de Bitfury no es nueva en la industria. Operativa desde 2011, Bitfury ha estado a la vanguardia de las innovaciones blockchain y su evolución de manera constante, desarrollando y poniendo en circulación productos de tecnologías de alto rendimiento y capacidades de procesamiento, además de sus respectivas soluciones de software para gobiernos y corporaciones, siempre enfocados en hacer viables soluciones de negocios blockchain funcionales y eficientes.
El crecimiento como empresa de Bitfury ha sido igualmente sostenido. En la actualidad la empresa emplea a más de 700 personas en 15 países en el mundo entero, con cinco sedes operativas en centros de datos ubicados en Islandia, Canadá, Georgia y Noruega.
El crecimiento de Bitfury también ha visto su manifestación en la expansión de capital y accionistas de la empresa, ampliando su base de accionistas especialmente. El capital está siendo sabiamente dirigido a continuar su expansión alcanzando segmentos de mercado adyacentes, como la inteligencia artificial. Al fin y al cabo cuenta además de con un impulso de capital, con el factor de experiencia tecnológica que es crucial.
El plan de crecimiento de capital estuvo asesorado por Bryan, Garnier & Co, un importante y bien asentado banco de inversión enfocado en el crecimiento empresarial en Europa, quien actuó como Asesor Financiero Único y Agente de Colocación para el grupo Bitfury en esta ronda privada de financiamiento.
El mecanismo de recaudación de fondos operó como una «colocación privada», en una campaña de recaudación de fondos que involucró la venta de acciones a instituciones de alto patrimonio, tales como fondos de cobertura, bancos y compañías de seguros. De esta manera se aseguró una expansión cualitativa y cuantitativa tanto en capital, como en calidad de inversores.
Todo esto se supo mediante un comunicado de prensa hecho por Bitfury en el que además expuso que entre los inversores de esta ronda privada de financiamiento se contaron inversores como el Galaxy Digital de Mike Novogratz, Macquarie Capital, Dentsu Inc., Armat Group y otros.
Tras esta ronda de financiación es natural que ocurran más pasos en lo financiero para consolidar la posición de la empresa. Los rumores de salida a la Bolsa de Valores han comenzado a circular y no es de extrañar que veamos muy pronto a Bitfury cotizando en el mercado bursátil. Se supo que existe la posibilidad de que la empresa lance próximamente una IPO.
Estas noticias vienen como una interesante continuidad de eventos de la empresa como la salida al mercado del más reciente hardware de minería ASIC de la empresa, el chip «Clarke«.