Puntos clave de la noticia:
- Al Warda Investments (ADIC) triplicó sus acciones de IBIT de ~2.4M a casi 8M, llevando su posición a $518M.
- El fuerte aumento ocurrió pese a la caída de Bitcoin desde $120K, reforzando su visión de largo plazo.
- ADIC define Bitcoin como “oro digital” y un activo clave para diversificar, respaldando su preferencia por ETFs regulados incluso mientras otros inversores se retiran.
Al Warda Investments, el brazo de inversiones del entramado soberano de Abu Dabi, ha más que triplicado su exposición a Bitcoin al incrementar su posición en el iShares Bitcoin Trust (IBIT) de BlackRock hasta unos $518 millones. El movimiento marca un giro estratégico audaz que refleja una fuerte convicción institucional en Bitcoin como reserva de valor a largo plazo.
Una apuesta soberana por Bitcoin en medio de mercados turbulentos
Documentos regulatorios muestran que Al Warda Investments, controlada por el Abu Dhabi Investment Council (ADIC), aumentó sus tenencias de IBIT desde unas 2.4 millones de acciones a casi 8 millones, un salto de aproximadamente 230%, ahora valorado en $517.6 millones. El momento también sorprende: este incremento ocurrió justo antes de que Bitcoin retrocediera desde un máximo de octubre por encima de $120,000 hasta caer por debajo de $90,000 en noviembre. Este aumento agresivo en plena volatilidad indica que la firma ve a Bitcoin como un activo estructural de largo plazo, no como una apuesta especulativa.
Un vocero de ADIC enfatizó que el fondo considera a Bitcoin como “oro digital”, parte de su estrategia para diversificar más allá de activos tradicionales. Los administradores soberanos de Abu Dabi parecen estar incorporando Bitcoin dentro de su marco de tesorería, y el IBIT se está convirtiendo en un vehículo clave para esa exposición. Es una señal contundente sobre el papel de los ETF regulados como la vía preferida para que instituciones masivas entren en cripto sin los desafíos de la custodia directa.
La decisión llega en un momento en que los ETF de Bitcoin en EE.UU. atraviesan salidas históricas. IBIT registró recientemente su peor día de reembolsos, generando dudas sobre el sentimiento del mercado. Sin embargo, el movimiento de Al Warda envía una señal opuesta: paciencia y convicción, reforzando la idea de que no todas las instituciones están retrocediendo. Algunas están duplicando su apuesta.
Analistas interpretan esta asignación como un mensaje claro del avance institucional: los fondos soberanos están adoptando exposición cripto regulada junto con clases de activos tradicionales. Para los EAU, Bitcoin ha dejado de ser un activo marginal y ahora forma parte de su estrategia macro de largo plazo.
Al aumentar su posición en IBIT de manera tan agresiva, Al Warda Investments deja claro que esto no es un experimento especulativo, sino una decisión deliberada para anclar parte de su patrimonio en Bitcoin. Podría abrir la puerta para que otros fondos soberanos sigan el mismo camino.