Puntos clave de la Noticia
- Aunque Bitcoin alcanzó un máximo nominal de $126,000 en octubre, su valor real en dólares de 2020 fue de apenas $99,848.
- El análisis de Alex Thorn utiliza el año 2020 como base, justo antes de la impresión masiva de dinero por parte de la Reserva Federal.
- Esta diferencia entre el precio nominal y real sugiere que el mercado podría tener más margen de crecimiento de lo que parece.
Poder ver a la cripto pionera en cifras récord podría ser una utopía económica. Según Alex Thorn, jefe global de investigación en Galaxy Digital, si analizamos el precio de Bitcoin, este aún no cruza la emblemática barrera de las seis cifras en términos de poder adquisitivo real.
if you adjust the price of bitcoin for inflation using 2020 dollars, BTC never crossed $100k
— Alex Thorn (@intangiblecoins) December 22, 2025
it actually topped at $99,848 in 2020 dollar terms, if you can believe it pic.twitter.com/bo3UGfBXbY
El experto sostiene que, aunque el precio nominal en los intercambios superó los $126,000 en octubre, la realidad es diferente cuando se descuenta la pérdida de valor del dólar estadounidense.
Al utilizar dólares constantes de principios de 2020 —el periodo previo a la expansión monetaria masiva por la pandemia—, el máximo histórico real se situó en los $99,848, quedándose a un paso del hito psicológico.
El debate entre alcistas y bajistas sobre el valor real
Esta distinción entre precios nominales y reales abre un debate profundo en la comunidad financiera. Para los optimistas, es una señal alcista que el precio de Bitcoin ajustado por inflación no haya alcanzado los $100,000.
Esto implicaría que el rally desde los mínimos de 2022 no ha sido tan parabólico ni «excesivo» como sugieren las gráficas tradicionales, lo que daría margen para que la tendencia alcista continúe sin enfrentar un recalentamiento inmediato del mercado.
Los críticos y escépticos, por el contrario, utilizan estos datos para cuestionar la eficacia de la criptomoneda como cobertura contra la devaluación monetaria. Argumentan que, si el rendimiento real es menor al percibido, el activo no está cumpliendo plenamente su promesa de proteger el capital frente a la impresión indiscriminada de dinero.
El informe además revela que 2025 fue un año de «desacoplamiento estructural«. Mientras las instituciones adoptaron la tecnología y el valor total bloqueado (TVL) en las redes aumentó, muchos tokens de Capa 1 terminaron el año con rendimientos planos o negativos.
En este contexto, entender el precio de Bitcoin ajustado por inflación se vuelve vital para los inversores que buscan medir el éxito real de sus carteras de cara a 2026.