Termina una nueva semana y con ello es momento de analizar todo lo sucedido en un nuevo Resumen Semanal de Criptonoticias.
Si hay algo de lo que podemos estar seguros, es de que la SEC no va a bajar la intensidad de sus ataques al espacio de las criptomonedas. Sin dudas, su nuevo objetivo parece estar en librar una guerra abierta total contra toda empresa u organización que tenga algo que ver con las monedas digitales. Sin embargo, parece que el ecosistema se muestra fuerte ante los ataques de los reguladores.
Esta semana, la Securities and Exchange Commission anunció una demanda a Paxos, el emisor de la stablecoin de Binance, BUSD. Esto es un hecho que sacudió al mercado ya que se desconocía la magnitud del impacto que podría tener en el Exchange más grande del mundo y en su stablecoin. Por lo que comenzaron a rondar los fantasmas de lo ocurrido hace casi un año con UST, la cripto de la ya desaparecida LUNA.
Rápidamente, CZ, CEO de Binance, usó su cuenta de Twitter para aclarar la situación. Asegurando que, si bien la SEC había prohibido la emisión de nuevos tokens BUSD, su Exchange seguiría apoyando a la stablecoin y permitiendo el trading y el staking con ella. A pesar de esto, hubo una salida masiva de fondos de los inversores de BUSD hacia otras stablecoins.
En otro frente de batalla, la SEC había anunciado la semana pasada la prohibición de la plataforma Kraken de continuar con su programa de staking. Este fue otro duro golpe para el mercado, que podría traer graves consecuencias, según dicen desde LIDO. Más aún, la SEC está estudiando endurecer las normas para aquellas empresas que custodien activos digitales.
Todas estas medidas, tuvieron un objetivo claro por parte de la comisión de bolsa: llevar el temor a todo el espacio de las criptomonedas. Desde pequeños ahorristas individuales hasta grandes bancos, la SEC buscó enviar un mensaje claro: “Si tienes criptomonedas, iremos por ti”.
Eso hizo tambalear al mercado, el cual comenzó la semana en números rojos. Pero, ante la segura sorpresa de la agencia reguladora, que buscaba que el mercado se desplomara, el mal momento duró apenas unas horas y las principales criptomonedas retomaron la senda alcista que han mantenido todo este 2023.
La criptomoneda más importante, Bitcoin, logró recuperarse rápidamente de una caída por debajo de los 22.000. Tras lo cual subió hasta máximos anuales, por encima de los 24.000, impulsando a todo el resto de altcoins y fortaleciendo la capitalización total del mercado. Continuando con el optimismo, Mike Novogratz, un importante inversor, aseguró que BTC podría alcanzar los 30.000 dólares en el corto plazo.
Por su parte, Cardano y Ethereum también tuvieron muy buenas semanas, no solo en cuanto a sus precios, sino ante la cantidad de actividad en sus respectivas blockchains. Lo que nos muestra a las claras que, a pesar de la guerra que libra la SEC, la comunidad de criptomonedas es sólida y cuenta con mucho más apoyo del que los reguladores esperaban.
