La noticia de la quiebra de FTX ha corrido como la pólvora en el transcurso de los últimos días. El exchange de criptomonedas, que antes se consideraba impenetrable, cayó en picada la semana pasada cuando empezaron a flotar los temores de su insolvencia. Se informó de que el director general de FTX, Sam Bankman-Fried, estaba en conversaciones con Changpeng Zhao, director general de Binance. Zhao ya había mostrado su interés en hacerse con el control de la empresa. Sin embargo, el acuerdo no llegó a buen puerto debido a varias razones.
FTX se declaró en bancarrota bajo el Capítulo 11, lo que se considera una de las mayores declaraciones de bancarrota de la historia. Sin embargo, la declaración de quiebra del exchange reveló que la empresa tiene un total de 100.000 acreedores. Pero se espera que el número total de acreedores supere el millón. Bankman-Fried declaró inevitablemente que siguió expandiendo el negocio demasiado rápido y que no identificó los posibles problemas del exchange.
Más de un Millón de Acreedores – FTX en Aguas Calientes
Las normas de quiebra establecen que los deudores deben presentar una lista con los nombres de los 20 principales acreedores no garantizados. Teniendo en cuenta la gran deuda, el exchange tiene previsto presentar una lista de los 50 principales acreedores en breve. En las últimas horas, FTX ha estado en contacto continuo con innumerables reguladores, tanto en Estados Unidos como en el extranjero. Entre ellos, la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos, la SEC y la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas.
Justo antes de su colapso, FTX ofrecía a muchos operadores la posibilidad de invertir en criptomonedas al contado, incluyendo el altamente complejo comercio de derivados. Teniendo en cuenta la crisis de FTX, las organizaciones, incluida la SEC, lanzaron una investigación exhaustiva contra estas deficiencias. Se creía que una mala estructura organizativa, una mala gestión de los fondos y otras razones de este tipo condujeron a todo el fiasco. Bankman-Fried es actualmente uno de los individuos más odiados en el espacio de las criptomonedas.
Hace apenas unos días, FTX detuvo todas las transacciones e incluso instó a los inversores a no depositar nada en el exchange. Como resultado directo de las amenazas de insolvencia, el mercado de criptomonedas tuvo que enfrentarse a un gran revés. Las criptomonedas, que ya se vieron afectadas en medio del criptoinvierno, tuvieron que enfrentarse a una purga en sus valores una vez más. Incluso las renombradas stablecoins, bien conocidas por mantener sus valores en la marca de 1 dólar, se vieron afectadas por el fenómeno.