Puntos clave de la Noticia
- Benjamin Cowen sugiere que un mercado bajista en Bitcoin frenaría el crecimiento de ETH.
- Fundstrat proyecta una posible corrección de Ethereum hacia el rango de $1,800 – $2,000.
- El máximo histórico de $4,946 alcanzado en agosto de 2025 actúa ahora como una resistencia crítica.
El 2025 estuvo marcado por grandes logros, ahora el precio del Ethereum va rumbo hacía un nuevo año cargando con una sombra de incertidumbre. Ciertamente el activo alcanzó un récord en agosto con $4,946, pero |estrategas del sector advierten que repetir esta hazaña en 2026 será una tarea compleja, condicionada en gran medida por el comportamiento de Bitcoin y la liquidez global.
Al respecto Bejamin Cowen dijo que, si Bitcoin confirma su entrada e el mercado bajista, sería más difícil que Ethereum mantenga una tendencia ascendente. Agregó Cowen que, los intentos por superar los máximos actuales podrían ser una “trampa para toros”:un rally efímero que atrae a inversores minoristas antes de una corrección profunda que podría devolver el activo al nivel de los $2,000.
Divergencia entre el corto y largo plazo
Esta postura cautelosa coincide con las proyecciones de Fundstrat Capital. La firma dirigida por Tom Lee predice una «reducción significativa» para la primera mitad de 2026, estimando que el precio de Ethereum podría retroceder hasta la zona de los $1,800 – $2,000.
Al momento de redactar esta noticia, ETH cotiza cerca de los $2,963, lo que significa que recuperar su máximo histórico requeriría un repunte superior al 40%, un movimiento que parece improbable bajo las actuales presiones macroeconómicas.
Pero, no todos los pronósticos son negativos. Mientras Cowen cree que la mayoría de las altcoins han agotado su potencial en este ciclo, considera a Ethereum como la única excepción con posibilidades de sorprender a largo plazo. Por su parte, Tom Lee mantiene una visión constructiva, sugiriendo que el precio de Ethereum podría haber encontrado un suelo psicológico tras caer por debajo de los $3,000.
Lee enfatiza que el papel de la red como pilar de las finanzas digitales y su adopción en Wall Street aseguran un futuro brillante en una ventana de 10 a 15 años. No obstante, para los operadores de corto plazo, el 2026 se perfila como un año de consolidación y defensa, donde la volatilidad de Bitcoin seguirá dictando el ritmo del ecosistema.
