Puntos clave de la noticia
- La jueza Colleen McMahon autorizó a los demandantes presentar nuevas pruebas sobre prácticas de Valor Máximo Extraíble (MEV).
- Se alega la existencia de una «Empresa Pump» coordinada que permitía a insiders comprar tokens antes que al público.
- La plataforma habría generado 722 millones de dólares en ingresos, mientras los minoristas perdieron hasta 5.500 millones.
Este jueves se conoció que la jueza Colleen McMahon, del Distrito Sur de Nueva York, concedió permiso para que avance una versión enmendada de la demanda contra Pump.fun y Solana, que afecta también a Jito Labs.
La decisión judicial surge tras la aparición de un informante confidencial que ha aportado pruebas sobre cómo estas entidades habrían facilitado prácticas abusivas de MEV (Maximal Extractable Value) para perjudicar a inversores minoristas.
Según los demandantes, el ecosistema operaba bajo una narrativa de «lanzamientos justos» que ocultaba una realidad estructural: el uso de infraestructura de validadores para dar prioridad a ciertos actores.
Los documentos señalan que mientras Pump.fun promocionaba tokens resistentes a estafas, permitía secretamente que insiders compraran a precios mínimos mediante curvas de vinculación automatizadas, dejando que el público general absorbiera las pérdidas masivas una vez que los privilegiados retiraban su liquidez.
El impacto del MEV y el futuro legal del ecosistema
La demanda contra Pump.fun y Solana pone la atención en el MEV, una técnica que permite a validadores o traders sofisticados reordenar transacciones para extraer ganancias. En este caso, se alega que las herramientas de Jito Labs y la red de Solana permitieron un control de ejecución por el cual ciertos participantes pagaban para adelantarse a las órdenes de compra minoristas. Este proceso habría convertido a la plataforma en lo que los demandantes describen como un «casino ilegal de memecoins«.
Cabe resaltar que cifras que rodean este litigio son astronómicas. Se estima que, entre marzo de 2024 y julio de 2025, los usuarios sufrieron pérdidas de entre 4.000 y 5.500 millones de dólares, mientras que la plataforma procesaba decenas de miles de lanzamientos diarios con márgenes de beneficio ínfimos para el inversor común.
En resumen, con la nueva fecha límite del 19 de diciembre para presentar la queja formal, la demanda contra Pump.fun y Solana se posiciona como un caso histórico que podría definir la legalidad de la manipulación del orden de transacciones en la arquitectura blockchain moderna.




