Puntos Clave de la Noticia:
- El paquete de ¥21.3 billones busca aliviar la presión inflacionaria y revertir la contracción del PIB registrada en el Q3 de 2025.
- El yen se desplomó a su punto más débil frente al dólar desde enero de 2025 y el rendimiento del bono a 40 años escaló hasta el 3.774%.
- La medida impulsa el interés en Bitcoin por la debilidad del yen, pero la amenaza de la liquidación del «yen-carry trade» introduce un riesgo de venta.
Un megapaquete de estimulo de 21.3 billones de yenes fue recientemente aprobado por el gobierno de Japón, la más grande inyección de fondos desde la era Covid, que desató un huracán de reacciones, afectado bonos, divisas y la dinámica del sector cripto.
Con la aprobación del paquete de estimulo por parte del gabinete, el gobierno busca impulsar el crecimiento y fortalecer su capacidad de defensa, con una meta de gasto de 2% del PIB para el 2027. De inmediato reajustaron las expectativas globales sobre riesgo.
Y es que, el “paquete de Japón” fue aprobado en un momento delicado. El PIB se contrajo un 0.4% en el tercer trimestre del año y la inflación se mantuvo por encima del objetivo del 2% del Banco de Japón, alcanzando el 3% en octubre. Las autoridades esperan que las nuevas medidas eleven el PIB real en 24 billones de yenes.
El Impacto Dual en Bitcoin
Las condiciones descritas por el paquete estímulo se están traduciendo directamente en el sector de activos digitales. La debilidad del yen por lo general incentiva a los inversores japoneses a buscar activos alternativos, incluyendo Bitcoin, especialmente en entornos de liquidez creciente. Esta tendencia se suma a un panorama global ya favorable, que incluye la posible relajación de la Reserva Federal de EE. UU. y el apoyo de liquidez de China.
Sin embargo, el riesgo de una liquidación rápida del yen-carry trade supone una amenaza. Si las instituciones se ven obligadas a deshacer posiciones para cubrir necesidades de liquidez, podrían vender activos, incluido Bitcoin, para cumplir con sus obligaciones. Así que, el paquete estímulo Japón presenta tanto un viento de cola por la debilidad del yen como un riesgo sistémico por la potencial reversión de la deuda a largo plazo.
