Puntos clave de la noticia:
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Fidelity atribuye la debilidad reciente de Bitcoin a una venta gradual de holders de largo plazo, pese al flujo constante de compras de ETFs y empresas.
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Los datos on-chain muestran una caída lenta en el porcentaje de monedas inactivas más de un año, lo que indica una toma de ganancias progresiva y no una capitulación masiva.
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El estancamiento del precio refleja el cansancio del mercado tras un octubre sin el repunte esperado; muchos inversores ajustan posiciones antes del cierre del año.
Bitcoin no logró sostener el impulso tras alcanzar un nuevo máximo histórico el 6 de octubre. Su precio cayó por debajo de los $100.000 y entró en una fase lateral que ha desconcertado a los mercados. Según Fidelity, la causa no está en la falta de demanda institucional, sino en una venta progresiva por parte de los inversores de largo plazo.
Fidelity Pone la Mira en los Holders Históricos
Chris Kuiper, vicepresidente de investigación de Fidelity, explicó que el flujo constante de compras por parte de ETFs y empresas no ha sido suficiente para compensar la salida paulatina de los holders históricos. Los datos on-chain muestran que el porcentaje de monedas inactivas por más de un año viene cayendo lentamente, en contraste con los desplomes bruscos que solían marcar los picos de ciclos anteriores. Esta vez, el proceso es más controlado: los holders de largo plazo venden sin urgencia, ajustando posiciones de forma gradual.
Este fenómeno representa una ruptura con el patrón clásico del mercado de Bitcoin. En ciclos pasados, las ventas masivas de holders veteranos solían coincidir con los máximos eufóricos. Ahora, el descenso es más suave, lo que refleja un desinterés progresivo más que una capitulación. Kuiper lo define como un “sangrado lento” que neutraliza el impacto de la demanda institucional y frena la recuperación del precio.
Bitcoin Rinde por Debajo del Oro y del S&P 500
El factor psicológico también pesa. Muchos inversores esperaban un repunte fuerte en octubre y noviembre, meses tradicionalmente alcistas, pero la falta de ese salto generó cansancio. Bitcoin ha rendido por debajo del oro y del S&P 500, y parte del mercado decidió asegurarse un beneficios antes del cierre del año, haciendo ajustes fiscales y de cartera.

Para Fidelity, esta venta ordenada podría prolongar la debilidad a corto plazo, aunque no altera los fundamentos positivos de BTC. La firma seguirá observando las métricas on-chain para detectar señales de agotamiento, mientras el precio continúa desconectado del avance estructural en adopción e infraestructura institucional.